Las organizaciones están compuestas de personas, estas son su mayor activo, y por ello no solo debemos ver a las empresas por lo que hacen ahora mismo sino por lo que podrían hacer.
Caso Linkedin y Marketplaces
Por ejemplo el caso de Linkedin, se podría pensar que es una empresa que ofrece una red social profesional, pero en realidad también son 15.000 personas que están construyendo un software para conectar de manera profesional.
La diferencia es clave, si seguimos el primer enfoque (Red social), las nuevas funciones que se pueden añadir son limitadas, pero si seguimos el segundo enfoque (15.000 personas), tenemos una gran oportunidad de construir nuevos productos y servicios que aporten valor a esta audiencia que ya está dentro de Linkedin, como por ejemplo con el nuevo proyecto de Marketplaces en el que están construyendo una alternativa a Fiverr.
¿Cómo puedo ayudar más a mis clientes?
Esta estrategia no solo la puede implementar Linkedin sino que cualquier empresa puede hacerlo, la pregunta clave es: ¿Cómo puedo ayudar más a mis usuarios?
Es simplemente, no parar de repetirte esta pregunta hasta que des con una lista de posibles features o nuevos proyectos que puedes hacer para montar más mini-negocios dentro de tu empresa, es lo que llamamos cadena de negocios.
La clave, bajo mi punto de vista es cambiar el foco de los números a tus clientes, a las personas, qué problemas tienen, qué quieren conseguir, y cómo tú les puedes ayudar, ellos estarán encantados de contarte sus problemas, pero ahora bien, tienes que ser capaz de investigar y no quedarte a nivel superficial si quieres construir algo que realmente les ayude. Identificar qué es lo que quieren decir y por qué quieren esto.
Llegará un punto en el que tu mismo no puedas desarrollar todo lo que quieren tus clientes, pero para ello puedes realizar colaboraciones con otras marcas para acelerar el proceso de desarrollo, lanzar un MVP…
Otro de los puntos importantes es testarlo con el mercado, de esta manera tendrás datos reales sobre el interés de tu público en esa nueva herramienta que vas a lanzar, o ese nuevo proyecto que te parece tan bueno.
Simplemente desarrolla una versión mínima y ponla en el mercado, haz los cambios lo más rápido que puedas, y sobretodo habla mucho con los clientes, de manera que valides que aquello que has creado satisface la necesidad que querías cubrir al principio.
Con esta filosofía en mente, de querer ayudar a las personas, siempre será una estrategia ganadora.